La conspiración

 La conspiración 

Dan Brown 

Alejandro Palomas (Traducción)

Umbriel 

2001

Esta es la segunda novela de Dan Brown, en ella aún no aparece su célebre personaje: el profesor Robert Langdon; pero la verdad se me hizo igual de entretenida. Sobre todo porque venía con la inercia de haber leído muchos libros académicos y de filosofía, que aunque también me gustan mucho, pues ya me hacía falta leer algo ligero y entretenido. 

Todo va de manera muy sencilla en esta novela. La NASA anuncia que ha descubierto enterrado en el hielo polar, un meteorito de supuesto origen extraterrestre. Toda la trama, y sus personajes giran en torno al conflicto que presupone averiguar si el meteorito es auténtico o no.

La analista de inteligencia Rachel Sexton y el oceonógrafo Michael Tolland forman parte del equipo de expertos enviados por la Casa Blanca a un remoto lugar en el Ártico, con la misión de autenticar el fabuloso hallazgo que ha realizado la NASA. Un descubrimiento que cambiará el curso de la historia y; de paso, asegurará al presidente su reelección. Sin embargo, una vez ahí descubren indicios de que se enfrentan a un fraude científico de proporciones gigantescas. Aislados en el entorno más hostil del planeta, perseguidos por unos implacables asesinos equipados con los últimos adelantos tecnológicos, lucharán por salvar la vida y averiguar la verdad. Mientras tanto, en los pasillos de Washington se libra una oscura batalla, un juego de tradiciones y mentiras donde nadie es lo que parece. ¿Les suena de algo?

Una de las cosas que más me sorprende de esta novela, además de lo ágil que es en su narrativa, es que en ella se habla de nanorobots capaces de ser inoculados en el torrente sanguíneo; y de tener la capacidad de rastrear solo con los teléfonos de esa época, estamos hablando de hace exactamente veinte años atrás, a cualquier persona en cualquier parte del mundo. Me imagino que hace dos décadas todo estos avances tecnológicos sonaban más a ciencia ficción; pero el autor asevera que toda la tecnología que menciona en su novela ya existía para el momento de la publicación. Así que no me parecen nada descabelladas las teorías que hablan del grafeno y otras sustancias que no nos dicen en las nuevas y avanzadas terapias experimentales que están siendo probadas directamente con la población mundial en este preciso momento.