Trasgresión al máximo

Historia de O
Pauline Réage 
Tusquets 

Como bien lo explica George Bataille en su espléndido ensayo El erotismo, éste es, en esencia, trasgresión. Y pocas son las historias tan trasgresoras como Historia de O. En donde el Bondage, la  Disciplina y Dominación; Sumisión y Sadismo; y Masoquismo están presentes desde las primeras líneas de este gran clásico del género.

Estamos ante un texto que trasgrede paradigmas y convenciones, en aras de lograr un efecto completamente erótico y sensual. Todo en él son sensaciones y manifestaciones voluptuosas de la carne. En el texto el amor brilla por su ausencia, y la decadencia, el morbo y la perversión afloran, creando un texto en extremo disfrutable para algunos y repugnante para muchos otros.

O es el nombre de la protagonista que nos introduce a un mundo de perversión y goce inquietante, incluso para el más instruido en estas lides. A la par que su "prueba y entrenamiento" avanzan, aumenta el morbo, que uno como lector no puede desdeñar. Lo sorprendente es que parece ser que ella no tiene mayor problema en ser tratada como un simple objeto sexual; e incluso parece ser que disfruta bastante las vejaciones y humillaciones a las que se ve sometida a lo largo de la novela.

Hubiera terminado en un dos por tres este estupendo libro; pero la verdad es que no quería. Me llamo profundamente la atención como la autora crea una suerte de alter-ego en O, quien está dispuesta a "sacrificar su alma y carne" en aras de demostrar su "amor" por René, su primer amante, quien la inicia en un mundo a un tiempo aterrador y fascinante.



Siendo este equilibrio -por demás notable- a lo largo del texto, la virtud principal de esta maravillosa joya de la literatura erótica.

No apto para todo público. Historia de O es uno de esos libros que uno bien deja pasadas las dos primeras páginas o no puede, ni quiere (como fue mi caso), dejar de leer con deleite. La autora nos lleva de la mano por un mundo sórdido y crudo, en donde no hay cabida para nada más que no sea el placer más perverso y el goce más intenso.

Pauline Réage es el pseudónimo bajo el que durante muchos años se ocultó Anne Desclos (1907-1998), intelectual francesa que en 1994 reconoció ser la autora de esta novela. Periodista, crítica de cine, traductora y colaboradora de la Nouvelle Revue Française, fue ayudante en la editorial Gallimard de Jean Paulhan: para él, a modo de carta de amor, escribió esta novela en 1954, y, posteriormente, su continuación, Retorno a Roissy.

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