Suicidio perfecto.
Petros Márkaris.
Byblos.
2005.


Original novela policiaca que cuenta la historia del detective Costas Jaritos, quien tras haber sobrevivido a un impacto de bala, se halla en su casa de Atenas sumamente aburrido durante su convalecencia. Cierta noche, uno de los más célebres empresarios griegos se quita la vida de manera espectacular, en pleno teledario. Este evento será el detonante de una extraña serie de suicidios —cuyo móvil permanece invisible—, que despertará en Jaritos la inquietud de investigar el caso, sólo para no “oxidarse” en demasía.

La novela está llena de humor e intriga, además de que nos da una bella y literaria descripción de una de las ciudades más emblemáticas para la cultura occidental: Atenas. Lo bello del libro es que aquí la ciudad aparece como un personaje más, y en ningún momento está idealizado por el autor; al contrario, en todo momento hace alusión a los muchos problemas que afronta el ciudadano ateniense normal: el interminable tráfico; las horas que lleva transportase por cualquier medio de un lugar a otro; el agobiante calor; el café y la comida griegas; la desconfianza que viven los ciudadanos entre ellos y con respecto a sus instituciones; la incapacidad de los cuerpos policiales para garantizar la seguridad de sus ciudadanos; la corrupción que alcanza a las más altas esferas políticas, periodísticas y empresariales. Cualquier parecido con la realidad mexicana es mera coincidencia.

Su ritmo y tratamiento son también muy interesantes. Al menos esta novela no se parece a ninguna otra que haya leído del género, porque creo que es la única en la que ni siquiera el lector más avezado posee una sola pista que le pueda indicar quién podría estar detrás de los misteriosos suicidios de importantes personalidades. Y no es hasta las últimas tres páginas que el misterio se devela de una manera por demás inesperada.

Una novela que además se presta mucho para le reflexión acerca de cómo las sociedades decadentes en las que vivimos, han hecho de la explotación de la muerte, la violencia y el morbo más recalcitrante su más grande negocio. Márkaris aprovecha a la perfección la trama de su novela para hablarnos de este problemática que a muchos nos les parece un asunto de importancia, cuando en realidad es muy importante. En una sociedad en donde el oprobio, la xenofobia, la intolerancia y la violencia se han convertido en los contenidos de los programas televisivos con mayor audiencia, cabría preguntarse ¿qué tipo de enfermad padece una sociedad que CONSUME en grandes cantidades la violencia y la intolerancia?
Una novela griega que vale mucho la pena, y que se disfruta bastante al leerse.

Petros Márkaris ha ganado renombre internacional con la creación de su personaje del comisario Jaritos, protagonista también de Noticias de la noche y Defensa cerrada.

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