Estudio en escarlata

Estudio en escarlata
Sir Arthur Conan Doyle






La primera aventura de Sherlock Holmes siempre me trae buenos recuerdos de la secundaria, que fue el momento de mi vida en donde comencé a leerlo, y a apasionarme por la novela negra o policiaca.

Hay muy poco que decir entorno a ella, porque al ser un clásico contemporáneo se han hecho tratados enteros acerca de los rasgos tan característicos que Doyle le dio a sus dos personajes, porque recordemos que todas las aventuras estás narradas desde el punto de vista del Dr. Watson, que forman parte ya del imaginario colectivo.

La manera tan peculiar en que se conocen; y establecen su vecindad en la el número 221b Baker Street, es quizá uno de los momentos más épicos de la narrativa detectivesca y policiaca. Gracias a la manera deductiva de pensar y la profunda observación, es capaz de resolver favorablemente aún los casos más enredados a los que se tienen que enfrentar sus colegas de Scotland Yard, Lestrade y su rival Tobias Gregson, para quienes Holmes trabaja como "agente consultor".

Sobre la trama

La historia esta narrada en dos partes, en la primera parte se narra que el Dr. John Watson regresó de permiso de la guerra en Afganistán de 1880 y por medio de un amigo conoce a Sherlock Holmes, como ambos estaban buscando un apartamento en alquiler, escogen alquilar uno en el 221 B de Baker Street, y así poder costearlo entre los dos. Sherlock  es requerido por el inspector Tobías Gregson para asesorarlo en resolver un misterioso crimen.
El Dr. John Watson, al que Sherlock Holmes había explicado la teoría de la deducción, es animado por este a investigar juntos el caso, así Watson participa en su primera investigación de un crimen junto a Sherlock Holmes. El misterioso asesinato se trataba del cuerpo de un hombre hallado en una casa deshabitada, en donde encontró la palabra “Rache”, escrita con sangre, Holmes acude al sitio y encuentra un valioso anillo de oro.

Sherlock Holmes con el informe del policía John Rance se hace de nuevas pistas. Nombra al caso como Estudio en escarlata. Pone un aviso solicitando al dueño del anillo, el aviso es respondido por una anciana  y Sherlock se lo entrega, pero la persigue sin embargo se le escapa, aunque Sherlock sospecha que era el asesino disfrazado. El inspector Gregson le informa a Holmes que ha detenido a un sospechoso.

El detenido por el inspector Tobías Gregson era el hijo de  madame Charpentier, la mujer que le alquilaba un piso al difunto Drebber, quien se peleó con este último por algo relacionado con la hija de la Sra. Charpentier, y como el joven Arthur se sintió inculpado Gregson lo detuvo, pero el inspector Lestrade les informa que han encontrado muerto al asistente de Drebber, el Sr. Stangerson. Gregson tendría que soltar a Arthur Charpentier.

Stangerson había sido asesinado por una puñalada al corazón. El inspector Lestrade dice que se ha encontrado con la palabra “Rache”, escrita con sangre en la pared, y ha hallado un par de píldoras. Sherlock Holmes les dice a Gregson y Lestrade que el caso esta resuelto y es cuestión de tiempo para atrapar al asesino. Sherlock  toma las pastillas y le da una a un perro y este muere, confirmando que se trata de un caso de envenenamiento.
Un jovencito le dice a Sherlock Holmes que ya ha llegado el auriga, Sherlock  invita al cochero a pasar y en un descuido de este le pone las esposas, y les dice a los inspectores que ese es Jefferson Hope el asesino de Drebber y Stangerson, los inspectores lo apresan y se lo llevan a la comisaría, donde confiesa ser el autor de los crímenes de los cuales se le acusa.

En la segunda parte de la novela Estudio en escarlata, se narra la historia de John Ferrier, un hombre que fue hallado moribundo en el desierto de colorado por una caravana de fieles mormones, suceso que paso en el año de 1847, John Ferrier estaba junto a una niña de unos cinco años de edad, ambos eran los único sobrevivientes de una expedición, los otros, según John Ferrier, murieron de hambre y sed.
Los mormones le prestaron su ayuda y los llevaron con ellos hasta Utah, donde fundaron su colonia, la ciudad de Great Salt Lake City. John Ferrier adoptó a la niña y le puso por nombre Lucy Ferrier. Junto con ella se hizo prospero y las tierras que le adjudicaron los mormones se convirtieron en unas de las más ricas y productivas. Cuando Lucy se convirtió en una hermosa mujer conoció a Jefferson Hope, y este se hizo amigo de John.

Jefferson pasó u  tiempo con Lucy en la finca, pero una vez tuvo que marcharse a buscar fortuna en las minas de oro de Nevada, y justo por ese tiempo el patriarca mormón Brigham Young, le exigió a John Ferrier que su hija Lucy debía casarse con algún joven mormón de la comunidad y le dio un plazo de un mes. John le envía un recado a Hope para que regrese y se lleve a Lucy, ya que iba a ser casada contra su voluntad.
Si desobedecían al Consejo de Ancianos y no se casaba Lucy con algún seguidor de la Iglesia de los Santos de los Últimos Días, sus vidas corrían peligro de muerte. Hope regresó al final del mes, y ayudó a John y a Lucy a escapar, sin embargo un grupo mormón, Los Ángeles Vengadores, los alcanzaron en las montañas.

Los Ángeles Vengadores, estaban comandados por los jóvenes Joseph Stangerson y Enoch J. Drebber, ambos hijos de unos patriarcas mormones con bienes de fortunas y ya casados con varias esposas, estos le dieron muerte al viejo John Ferrier enterrando su cuerpo en las montañas, y se llevaron a Lucy, la cual fue obligada a casarse con Drebber, y Jefferson Hope se salvó porque en esos momentos estaba de casería.
Lucy Ferrier falleció a los pocos días, al parecer presa de la tristeza, John durante la noche de su sepelio irrumpió en esa sala y tomó el anillo, y se internó en las montañas, pero al verse solo y sin recursos se retiró y juró vengarse. Al cabo de 05 años regresó y se enteró que Stangerson y Drebber se habían ido de la ciudad, pero los buscó por todos los Estados Unidos, hasta que dio con ellos pero en Londres.

Al localizarlos en Londres, se empleó como cochero y empezó a cazarlos, primero mató a Drebber haciendo que se tomara una de las píldoras y se tomó la que tenia veneno, y fue cuando extravió el anillo encontrado por Holmes,  luego visitó a Stangerson en el hotel y como se resistió lo apuñaló en el corazón, dejando tiradas las pastillas que el inspector Lestrade halló y le mostró a Sherlock Holmes.
Sherlock Holmes dedujo que era un rival de Drebber el asesino y que lo había asesinado envenenándolo, luego Jefferson Hope les explicó que le dio a Drebber a elegir una de las pastillas, eran dos idénticas, pero una sola tenia el veneno, Drebber debía elegir una, y Hope la tomaría la otra, Drebber eligió la que le causó la muerte. Sherlock les explicó que supuso que eran un cochero en particular el asesino, porque Drebber en Estados Unidos ya lo había denunciado cuando lo encontró en California.

Por ello Sherlock Holmes le pagó a un muchacho para que buscara al cochero Jefferson Hope, y lo hiciera ir al 221 B de Baker Street donde lo apresaría como efectivamente sucedió. Al día siguiente del arresto de Hope este muere en la comisaría, debido a un mal crónico del corazón, y la prensa refiere el caso como resuelto por la policía de Scotland Yard con la ayuda del detective Sherlock Holmes.


Comentarios

Anni Fernandez dijo…
Fascinantes los escritos de sir Arthur Conan Doyle, un extraordinario y versátil ser humano.
Conociendo atisbos de su vida, podemos tener alguna explicación a tan grandiosa colección de relatos.

La serie de Sherlock Holmes, nos lleva de la mano de la intriga, emoción, perspicacia a la resolución de enigmas y, tal vez, un deseo infinito de ser ese eterno y fiel compañero, la mano derecha de Sherlock, el flemático Watson.
Indudablemente, el poder de la ficción, inmune a los estragos de la rutina, rebasa las tibias evidencias del mundo real.

¡Excelente reseña y próxima lectura!
¡Gracias por compartir!
Unknown dijo…
¡Gracias Anni por ser tan buena lectora y persona!

Entradas más populares de este blog

Jesús: una historia de iluminación

Trece latas de atún

Piensa diferente, vive diferente